Se termina el día. Sensaciones raras en mi cerebro: alegría, malestar, pena, rabia, impotencia, sosiego .... El día no termina bien.
Tengo que tragarme las palabras para no acabar con el encanto, tú nuevamente en mi vida y hablarte es tan hermoso como pensar que estoy volando en una nube directo al sol, tan efímero como el suspirar y respirar nuevamente tu aire (tu presencia, leyendo estas líneas).
Pero no puedo. Te vas y otra vez el espacio en blanco y negro sobre mí, atrapándome.
Y sí, es cierto, te necesito.
Te extraño.
lunes, 21 de febrero de 2011
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2 comentarios:
no deberias
Ok.
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